Una ventana a un mundo perdido en Ecuador: as?? fue el hallazgo de los primeros insectos f??siles en ??mbar del Cret??cico de Suram??rica
Colombianos participaron en el descubrimiento de insectos y ara??as atrapados en resina fosilizada que muestra c??mo cambiaban los bosques ecuatoriales.
Se recuperaron varios centenares de piezas, de las cuales unas 50 fueron trasladadas a Espa??a y Alemania para su an??lisis.
Foto:
Edwin Cadena
El
??mbar
es un recurso cient??fico de gran valor porque preserva organismos con un nivel de detalle que no se alcanza con ning??n otro tipo de fosilizaci??n.
En su interior quedan encerrados insectos, restos vegetales o incluso telara??as que permiten observar estructuras casi intactas millones de a??os despu??s
, casi como si hoy estuvieran vivos. Esta cualidad hace que cada yacimiento de resina fosilizada con bioinclusiones ???organismos fosilizados en su interior??? aporte informaci??n esencial sobre los ecosistemas en los que se origin??.
En el caso de
Suram??rica
, hasta hace poco los registros eran escasos y fragmentarios.
Los dep??sitos mesozoicos identificados no hab??an ofrecido insectos ni ara??as, por lo que el panorama sobre los bosques de hace m??s de 100 millones de a??os era incompleto.
Ahora, un hallazgo en Ecuador cambia la situaci??n.
Por primera vez se han encontrado insectos f??siles preservados en ??mbar del Cret??cico en el continente
, lo que abre una ventana in??dita para conocer c??mo eran los
bosques ecuatoriales hace unos 120 millones de a??os
.
El descubrimiento se produjo en la provincia de Napo (Ecuador), en la cantera Genoveva, y ha sido publicado en la revista
Communications Earth & Environment
. Los investigadores, entre ellos el paleont??logo colombiano Edwin Cadena, se??alan que el hallazgo
permite observar un ecosistema en plena transformaci??n: los bosques de con??feras y gimnospermas, que hab??an dominado durante millones de a??os, empezaban a ser reemplazados por plantas con flores
, un cambio que reconfigur?? la vida terrestre en el planeta.
El hallazgo
El v??nculo de Cadena, profesor del programa en Ciencias del Sistema Tierra de la Universidad del Rosario, con Ecuador comenz?? en 2015, cuando se incorpor?? como docente en la Universidad Yachay-Tec y lider?? campa??as de campo en distintas zonas.
Predominan los mosquitos, unos asociados a ambientes acu??ticos y otros con hembras hemat??fagas.
Foto:
Edwin Cadena
???Este descubrimiento del dep??sito de ??mbar surge en parte cuando yo tuve la oportunidad de ser profesor de la Universidad Yachay-Tec, donde hice gran cantidad de trabajo de campo entre los a??os 2015 a 2018. En una de estas salidas revisit?? una localidad en la provincia de Napo que en los 60 un ge??logo ecuatoriano hab??a reportado que hab??a visto ??mbar y entonces pues decidimos volver a la localidad???, explica Cadena.
En esa visita encontraron peque??os fragmentos de resina fosilizada y cut??culas de hojas. Con el paso de los meses, el equipo fue creciendo y sum?? a especialistas como los cient??ficos colombianos Fabi??n Herrera, M??nica Carvalho y Carlos Jaramillo. M??s tarde, con el descubrimiento de piezas m??s grandes, se hizo evidente la necesidad de convocar a expertos en ??mbar: M??nica Sol??rzano, Xavier Delcl??s y Enrique Pe??alver. Ellos lideraron el estudio publicado recientemente.
Delcl??s, catedr??tico de Paleontolog??a en la Universidad de Barcelona (Espa??a), lleva m??s de 25 a??os dedicado al estudio pluridisciplinar del ??mbar. Su trabajo abarca desde el an??lisis de los organismos atrapados en la resina hasta el proceso de formaci??n de los dep??sitos y los factores que hacen posible su preservaci??n.
???
El ??mbar de Ecuador era conocido por haber aparecido en testimonios de sondeos de petr??leo.
Las rocas que contienen el ??mbar son rocas madres de hidrocarburos que se explotan desde hace a??os en la Cuenca de Oriente. Con investigadores de Colombia y Ecuador buscamos localidades en las que hubiera canteras en las que se extrajeran materiales de las formaciones que contienen el petr??leo, para buscar en superficie el ??mbar que se hab??a citado en el subsuelo de la regi??n de Napo???, detalla Delcl??s.
El grupo supo de restos de plantas y piezas de ??mbar hallados en Archidona. Con esa evidencia gestionaron un permiso del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) de Ecuador y visitaron la cantera Genoveva. All?? se confirm?? la magnitud del yacimiento,
considerado hoy el dep??sito de ??mbar mesozoico m??s relevante de Am??rica del Sur
.
Un bosque h??medo y diverso en el supercontinente Gondwana
La investigaci??n revel?? que
el yacimiento alberga dos tipos de ??mbar: de ra??z, formado bajo el suelo, y a??reo, producido en la superficie de los ??rboles
. El primero suele carecer de f??siles, mientras que el segundo es el que conserva insectos y restos vegetales.
???De ese ??mbar a??reo tenemos cerca de unas veinte a veinticinco bioinclusiones, o sea, insectos principalmente preservados en ese ??mbar. Lo que estimamos es que el potencial de esa zona es enorme, apenas empezamos a descubrir un poco de lo que puede ser???, explica Cadena.
Seg??n Delcl??s, s
e recuperaron varios centenares de piezas, de las cuales unas 50 fueron trasladadas a Espa??a y Alemania para su an??lisis
, mientras que el resto permanecen en dep??sito en la Escuela Polit??cnica Nacional en Quito. ???La estimaci??n de lo que puede haber es incalculable, pero seguro miles de piezas de ??mbar???, afirma.
En las primeras muestras analizadas se identificaron 22 insectos de cinco ??rdenes distintos.
Predominan los mosquitos, divididos en dos grupos: unos asociados a ambientes acu??ticos y otros con hembras hemat??fagas, que probablemente se alimentaban de sangre de dinosaurios y otros vertebrados de la ??poca.
Adem??s, se hall?? una telara??a que demuestra la presencia de ara??as tejedoras en ese bosque.
Los datos sugieren un entorno muy h??medo, con escasa evidencia de incendios. ???En t??rminos de biodiversidad, la gran parte de los insectos que aparecen ah?? coinciden con lo encontrado durante el Cret??cico en otros lugares del mundo. Pero este es apenas un primer estudio; necesitamos m??s individuos para tener una idea m??s completa de la biodiversidad de ese ecosistema pasado???, a??ade Cadena.
Un mundo hasta ahora desconocido
Uno de los mayores obst??culos para conocer los ecosistemas cret??cicos en Suram??rica es el acceso a las rocas.
La densa cobertura amaz??nica limita la exposici??n de formaciones antiguas
. ???Hay buena parte del territorio que est?? cubierto por la Amazon??a y esto promueve que obtener niveles rocosos para el estudio de la fauna y flora del pasado sea bastante dif??cil. Nos vemos obligados a trabajar en lugares donde ya se est?? extrayendo roca o ??ridos???, explica Delcl??s.
Por eso, el ??mbar cobra un valor especial. Como se??ala Cadena, ???las bioinclusiones son claves porque la preservaci??n en estas resinas es excepcional. En la mayor??a de los casos tenemos todo el individuo, detalles como alas, patitas, los ojos. Usualmente el otro tipo de f??siles no preserva tanto???.
El equipo espera ampliar la investigaci??n en la cantera Genoveva y profundizar en el an??lisis del Cretaceous Resinous Interval (CREI), un periodo de m??s de 50 millones de a??os en el que distintos ??rboles produjeron grandes cantidades de resina. ???Nuestra intenci??n es poder volver a estudiar los dep??sitos de ??mbar y obtener nuevas bioinclusiones e incrementar la colecci??n de plantas. La comparaci??n con los datos del hemisferio norte ser?? fundamental???, afirma Delcl??s.
El hallazgo ha despertado inevitablemente comparaciones con la popular saga
Jurassic Park
, en la que un mosquito en ??mbar se convierte en la clave para
clonar dinosaurios
. Los investigadores son claros al respecto.
El descubrimiento se realiz?? en rocas de aproximadamente 112 millones de a??os.
Foto:
Edwin Cadena
???S??, lastimosamente Jurassic Park gener?? una idea muy err??nea de lo que es la preservaci??n excepcional???, aclara Cadena. ???
Aunque los insectos est??n preservados tridimensionalmente, hay un deterioro de la parte org??nica
. Las biomol??culas, como ADN y prote??nas, se degradan r??pidamente. Se conserva la estructura 3D, pero no la parte molecular. El ??mbar no es algo que uno busque para an??lisis moleculares, pero s?? tiene una enorme importancia por la preservaci??n en tres dimensiones de los espec??menes???.
El descubrimiento en Napo no servir?? para revivir dinosaurios, pero s?? permitir?? comprender con un nivel de detalle in??dito c??mo era un bosque ecuatorial de Gondwana hace 120 millones de a??os. Un entorno h??medo, diverso y en transformaci??n, atrapado para siempre en la transparencia del ??mbar.